"Ácido Úrico y gota".

¿Le gusta mucho comer hígado, riñones, sesos?

¿Le gusta tomar bebidas alcohólicas como vino, cerveza?

Si a esto se le suma una predisposición hereditaria, puede Ud. terminar con un doloroso ataque de gota.

Eso sí, las mujeres se ven afectadas mucho más raramente que los hombres.

La primera crisis empieza bruscamente, a menudo de noche, y se localiza en el dedo pulgar del pié, aunque también se manifiesta en los dedos de las manos, muñecas y tobillos, y muchas veces el dolor se hace tan insoportable, que el enfermo no soporta el peso de las ropas de cama.

Esta crisis dura algunos días y luego no deja huellas, pero si se repiten durante años y no se tratan, pueden aparecer los signos de una lesión crónica de la articulación afectada. Se trata de deformidades permanentes que comprometen en diferentes grados la motilidad de manos y pies, y en esta fase crónica aparecen lostofos, que son cristales de ácido úrico que se acumulan; tienen un color amarillento, y al comienzo son algo blandos pero luego son durísimos.

¿Qué hay que hacer?

Debemos pensar que con una dieta normal, estamos introduciendo diariamente de 600 a 1000 milígramos de purinas; es decir, estos precursores del ácido úrico, además del material con el que se construyen los ácidos nucleicos. Hay alimentos que son riquísimos en ellas, otros contienen cantidades discretas, y otros son casi exentos de ellas. Dietas con predominio de azúcares o de proteínas pobres  en purinas, como son las de la leche, el queso o los huevos, facilitan la eliminación del ácido úrico. No comer en exceso, aunque sí puede comer fruta abundante, leche y quesos no fermentados, que corrigen el estado de acidosis latente, característico del gotoso. Además, se recomienda actividad física moderada pero regular.

Fuente:Enciclopedia Consulta, Editorial Codex S.A.